viernes, 18 de julio de 2008

Qué es la desescolarización?

Qué es la Desescolarización?
Por Pat Farenga ------------ --------- --------- ---

Esta es una práctica conocida también como aprendizaje dirigido por el interés, aprendizaje iniciado por el niño, natural, orgánico, ecléctico o auto dirigido. Recientemente, el término “desescolarización” ha sido asociado con el tipo de “escolarización en casa” que no utiliza un currículo fijo. En forma breve, defino a la desescolarización como la práctica de dar a los niños tanta libertad para aprender en el mundo como sus padres puedan tolerarlo. La ventaja de este método es que no requiere que usted, como padre, se convierta en alguien más, (por ejemplo en un maestro profesional derramando conocimiento en los recipientes del niño en una forma planificada).

En cambio, ustedes viven y aprenden juntos, buscando preguntas e intereses en la medida en que estos aparecen, y utilizando la escuela convencional “a demanda”, si es que se la llega a utilizar. Esta es la forma en que aprendemos antes de ir a la escuela y la forma en la que aprendemos cuando abandonamos la escuela y entramos en el mundo del trabajo. Así, por ejemplo, el interés de un niño pequeño en un hot rod puede llevarlo a estudiar la forma en que trabaja el motor (ciencia), y la época en la que el auto fue construido (historia y negocios), quién construyó y diseñó el auto (biografía), etc. Ciertamente estos intereses pueden llevar a leer libros, tomar cursos o realizar proyectos, pero la diferencia importante está en que es el estudiante quien escoge y decide involucrarse libremente en sus actividades. Estas no le fueron asignadas a través de un currículo que deba ser cumplido en un tiempo y lugar, aunque algunos padres con un punto de vista más “controlador” de la desescolarización podrían ciertamente influenciar y guiar a sus niños en sus elecciones.

La desescolarización, a falta de un mejor término (hasta que las personas empiecen a aceptar que la vida es una parte y segmento del aprendizaje), es la forma natural de aprender. Sin embargo, esto no significa que los niños desescolarizados no tomen clases tradicionales o utilicen materiales de currículo cuando el estudiante, o padres e hijos juntos, deciden que esa es la forma en que quieren hacerlo. Aprender a leer o a hacer ecuaciones cuadráticas no son procesos “naturales”, pero a pesar de esto los niños lo aprenden cuando para ellos tiene sentido hacerlo, no porque han llegado a cierta edad o están siendo obligados por una autoridad arbitraria. Por lo tanto, no es inusual encontrar a niños desescolarizados de apenas ocho años estudiando astronomía, o a niños de diez que están empezando a aprender a leer.

------------ ---------Patrick Farenga es el presidente de Holt Associates Inc, considerado una autoridad en el tema de la desescolarizació n. Es conferencista y autor de varias publicaciones, incluidos los libros “The Beginner’s Guide To Homeschooling” y “Teach Your Own: The John Holt Book of Homeschooling” ------------ --------- -----

Traducido al Español por Mónica Salazar, de www.familialibre. com , con autorización del autor. Título original en Inglés :
“What Is Unschooling?” http://www.holtgws.com/whatisunschoolin.html
Traducción de febrero de 2007.

jueves, 17 de julio de 2008

Links sobre Homeschool

Acabo de incluir, en la columna de la derecha una nueva sección de enlaces a páginas dedicadas al homeschool.
Por ahí fue el comienzo de mi investigación, hace más de tres años.
Los puse para ustedes, los que sienten curiosidad, o no se explican cómo puede una familia llegar a cometer semejante "disparate".

Buen provecho!

viernes, 11 de julio de 2008

Mariale cumple 11 años!

Hoy hace 11 años nos convertimos en papás... y desde ese día han pasado tantas, pero tantas cosas que ya no recuerdo cómo era la vida sin hijos.

Durante estos 11 años mis impresiones sobre Maria Alejandra han cambiado año por año: recuerdo cuando sólo era ella, pasábamos el día juntas, hacíamos mercado, jugábamos en el apartamento, veíamos los aviones por la ventana, oíamos colorin colorradio, íbamos a estimulación temprana. Recuerdo el primer cambio de pañal en la clínica, el conflicto con mi mamá por la lactancia materna (yo gané, jejeje), la primera cita con el pediatra, el registro en la notaría... siempre con ese sentimiento de no tener ni idea de nada.. primiparada absoluta!!
Creo recordar que no era fácil, que al principio la lactancia fue sanguinaria, que hubo cólicos, gripas, fiebres y trasnochadas. Despertadas a mitad de la noche porque se paraba en la cuna y luego no sabía cómo volverse a sentar, preocupación porque no quería gatear, tardes de llanto, muertas de cansancio y ella sin querer dormir su siesta.

Sin embargo todo era pura novedad, como estar jugando a la casita. No me daba cuenta de lo que estaba dejando atras, y era tan feliz que no me importaba. Ni me imaginaba que en once años todas esas renuncias me iba a estar pasando cuenta de cobro.
Luego vino Juan Jose, y la niña tranquila y feliz, que saludaba a todos y se dejaba alzar de cualquiera, se volvió tímida e introvertida. Con Juan más grande empezaron las peleas, y yo no entendía cómo una niña tan chiquita podía actuar con tanto odio contra su hermano... luego los papeles se invirtieron y ella fue la que recibió los golpes por un buen rato.
Y seguía la primiparada... cambiarnos de casa, escoger jardín infantil, colegio. Y empezó la vanidad... la niña a la que yo había vestido con colores primarios, jeans, zapatos azules, empezó a escoger su ropa y se convirtió en la niña de mis pesadillas: ropa rosada, boleros, escarcha, barbie, moñitos y corazones y hasta hizo el intento con unos zapatos blancos de charol a los que me negué rotundamente a pesar de su llanto. Chicles muy pegados, camisetas ombligueras, nada suelto, no lo soportaba (se me ocurrió pensar que la estábamos controlando mucho y sentir algo suelto la desconcertaba...)
Hubo también una época en la que nunca estábamos de acuerdo. Yo sentía que ella se quería imponer y supongo que ella sentía lo mismo conmigo; "lucha de poder", le dicen a eso en los libros sobre crianza. Yo la veía como una niña egocéntrica que no demostraba el más mínimo interés en los demás, lloraba aterrada de haber llegado a criar a una personita tan "mala gente". A sus nueve años no me imaginaba cómo podría ser su adolecencia si seguíamos así. Pero en algún momento cambió y yo por estar atendiendo a mis dos bebés no lo noté. Sólo puedo decir que ahora es una niña colaboradora y considerada, que no expresa mucho cariño por Juan José pero adora a sus dos hermanitos chiquitos; es la niñera perfecta, los conoce, los entiende y los maneja casi tanto como yo. Sus pataletas por la ropa siguen y supongo que aumentarán en los próximos años pero se le nota el esfuerzo por entender y adaptarse a las situaciones.
Hoy, y gracias a ella, he aprendido que con los niños todo son etapas, que todo pasa, todo se supera, y la madurez va llegando al mismo tiempo que ellos se preparan para irse alejando.
Gracias por enseñarme a se mamá. Feliz cumpleaños, mi princesa mayor!!!

jueves, 10 de julio de 2008

Intensidad

Parece que no viniera por aquí hace un siglo... pero sólo hace diez días. Y es que han sido diez días tan intensos para mi a nivel emocional, que siento que han pasado muchas cosas en mi interior.

Lloré y lloré, sola, en el baño, si entender el por qué de las cosas, dándole vueltas a la vida, quejándome y quejándome de mi "triste suerte", imaginándome las razones más absurdas y montándome en unos videos.... que mejor ni les cuento.
Llegué a sentir que incluso mi familia y mi relación con Martín, lo único que hasta ahora siempre había sido seguro para mí, estaba en riesgo.

Luego pude hablar y desahogarme (gracias a la vida por las amigas), y esto me ayudó a ver las cosas desde otra perspectiva, a darme cuenta que si alguien más puede verle alguna salida a esto, entonces de alguna manera yo debo ser capaz de encontrarla también. De aquí saque valor para hablar con Martín y decirle que no soy tan fuerte como el cree, y que dentro de sus múltiples cargas también va a tener que llevarme a mi de vez en cuando... necesito más apoyo, y lo necesito más a él.

Ahora tengo muchos propósitos en mente, encaminados a encontrar mi rumbo... que creo que lleva varios años perdido y no me había dado cuenta. También a llenar el vacío espiritual que por tantos años he sentido pero del que no me había ocupado porque tenía cosas más urgentes que atender. Y mientras mi mamá me manda libros de oración yo busco otros de meditación y yoga... por algún lado tengo que encontrarme, pero hoy me siento tranquila por que por lo menos tengo la intención de hacer algo por mí, que estaba necesitando con urgencia.